Concha Velasco

Concha Velasco con frecuencia interpretó a la muchacha moderna pero honrada, simpática y no casquivana, redicha, pícara, con sentido común y respetuosa del orden. El temprano reconocimiento de la actriz llegó con su primer papel importante en Las chicas de la Cruz Roja (Rafael J. Salvia, 1958). Con la llegada de la cultura del pop español se introducen valores hedonistas que se oponen a la contención y sobriedad religiosa tradicional, al tiempo que incitan al ocio y al consumismo y propugnan una mayor tolerancia y libertad sexual. Velasco se convirtió en emblema de una cierta modernidad —no por casualidad, la actriz adoptó el diminutivo de su nombre como carta de presentación para subrayar la jovialidad que representaba durante este período inicial de su trayectoria profesional—, lo que la llevó a encarnar simbólicos roles que desempeñaban una clara oposición dramática con lo tradicional.

Concha Velasco (Valladolid, 1939​)

El indulto (José Luis Sáenz de Heredia, 1961)

Cuatro noches de boda (Mariano Ozores, 1969)

Su imagen sirvió de referencia a una nueva generación de mujeres con vestidos ligeros de colores vivos, pelo corto y minifaldas, que dejaba a la vista una considerable porción del cuerpo. Así mismo, el uso de pantalones representó un firme paso en el deseo de emancipación de la mujer y manifestaban su pleno deseo de reivindicación de igualdad entre el hombre y la mujer en la sociedad.

“no hace falta estar enamorada para sufrir el machismo hispánico.”

Concha Velasco en una entrevista en Autorretrato , RVTE (1984)
Revista Ondas, núm. 347 (1967)
Revista Sueños de Amor, núm.30 (1965)
Julia y el celacanto (Antonio Momplet, 1961)

La verbena de la paloma (José Luis Sáenz de Heredia, 1963)
Pim, pam, pum… ¡fuego! (Pedro Olea, 1975)

La ensoñación: Las chicas de la Cruz Roja (Rafael J. Salvia, 1958)

El baile liberador: Historias de la televisión (José Luis Sáenz de Heredia, 1965)

El cuerpo seductor: El arte de casarse (Jorge Feliu y José María Font, 1966)

El cuerpo seductor: En un lugar de la Manga (Mariano Ozores, 1970)

*Este texto incorpora y resume contenidos del capítulo “Concha Velasco: la fierecilla domada” de Rubén Higueras, del libro El deseo femenino en el cine Español (1939-1975). Arquetipos y actrices. (Madrid: Cátedra, 2022), publicado en el marco de este mismo proyecto de investigación.